Un nuevo concepto: el módulo

La RAE define como módulo lo siguiente:

 

A tenor de esta definición uno puede pensar que una "instalación modular" de carácter ferroviario puede ser algo un poco soso y aburrido, algo que se repita de forma regular y no varíe en ninguno de sus campos, cuando la realidad es totalmente diferente.

Un módulo, en el contexto que nos ocupa, no es más que una pequeña porción de una gran maqueta que se acopla a otros módulos similares y que todos juntos conforman una gran instalación que por su gran envergadura y variedad sería imposible de crear a nivel particular. 

Éstos módulos se acoplan unos a otros mediante una "interfaz" normalizada en sus extremos que todos los modulistas deben respetar y cumplir para un correcto funcionamiento en la instalación.

El contenido y decoración de los mismo es libre para cada modulista y puede variar entre la recreación de algún lugar real, un punto ferroviario que exista o una instalación ficticia e imaginaria.

Como he comentado antes, un módulo se rige y se construye bajo una normativa estricta que debe ser muy concreta en ciertos aspectos, sobre todo si queremos "conectar" nuestro módulo con el otros aficionados. Actualmente existes muchas normativas a nivel mundial que van desde las estandarizadas y regladas para todo el mundo con el uso de normas NEM, hasta normas privadas de algún tipo de asociación y que son de carácter interno. En España existen dos grandes normativas para la construcción de módulos, la normativa de la web Plataforma-N y la normativa del Club-N de España (Euro-N). Por lo que he podido averiguar la norma de Club-N es de las más extendidas en nuestro país, pero eso no quita que no se puedan usar módulos de ambas normativas de forma conjunta mediante el uso de módulos de transición.

Cada normativa rije como ha de contruirse el módulo, las cotas que ha de tener, en algunos casos los radios mínimos, longitud del módulo, formas de cada uno y sobre todo y más importante la interfaz de conexión entre cada uno de ellos. La interfaz de conexión no es más que una de las caras del módulo que se une con el siguiente. Tienen que estar muy bien construidas y muy bien medidas ya que las vías se unen con las siguientes en ese punto y la precisión debe ser perfecta.

La elección de una normativa u otra es algo personal y que debe tener en cuenta ciertos aspectos. El primero y principal es que se ajuste a lo que nosotros tengamos en mente construir, no vaya ser que la elegida no nos permita ciertas libertades que necesitemos para construir la idea que tenemos en mente. Otro punto a tener en cuenta es la geografía. Es preferible elegir una normativa que sea más común en la zona donde vivamos que otra, aunque como he dicho con módulos de transición no habría problema alguno.

Una cuestión importante que no he mencionado aun es ¿por qué construir una maqueta en módulos, cuando podría construir otra más pequeña y adecuada al sitio de que disponga? Pues muy sencillo, cuando me he mudado me dado cuenta de que a pesar de haber diseñado la primera maqueta de forma que la pudiera sacar de casa, a la hora de transportarla era muy engorrosa (necesitaba una furgoneta grande). Con los módulos este problema desaparece siempre y cuando los construyamos pensando en este detalle. Otro punto por el que he elegido la construcción por módulos es porque en el cuarto donde va a estar ubicada no es exclusivo para los trenes (más quisiera yo) sino que es en plan cuarto de invitados, cuarto de estudio/trabajo, etc y debe ser más polivalente. Con los módulos puedo terminar de jugar, recogerlo y colocarlo en su estantería en un rincón y no dejarlo en mitad del cuarto por medio. Otro punto a tener en cuenta es el transporte, como dije en mi post anterior, esta casa no será la definitiva por lo que he de pensar un sistema de transporte que no implique otro desembolso más de la cuenta.

Por todas estas cuestiones y por otras muchas que no vienen al caso, he decidido probar suerte con una maqueta modular.

Que Dios reparta suerte!